El Dios del Cambio

La Biblia dice que Dios no cambia; dice que Dios es el mismo ayer, hoy, mañana y por siempre.  Pero aún así yo lo llamo el Dios del cambio.  El cambio que puede hacer sobre tu vida y sobre tus circunstancias.  He escuchado a mucha gente hablar de Dios y de las cosas de Dios.  Creen saber los asuntos del Eterno, no queriendo yo decir que yo sé más que ellos.  Pero me he topado con la situación y es hasta enfermiza de muchos “cristianos” que dicen saber de Dios cuando apenas abren la Biblia para leer de ese Dios que dicen conocer.

El problema con esto es que perdemos la percepción de las cosas divinas porque partimos de una perspectiva natural que busca entender las cosas que son eternas y en eso tenemos que tener mucho cuidado.

Creo que ha llegado el tiempo de Dios en el que desea que la Iglesia sea una como nunca antes.  Ha llegado el tiempo de Dios en que nos debemos tratar como hermanos, pues así nos llama la Biblia.  Somos hermanos en Cristo.  El mundo debe conocernos y conocer a Cristo en nosotros por medio del amor que nos tenemos los unos a los otros.  En esto conocerán que yo soy el Cristo, en que se amen los unos a los otros.  Ésta es la manera en que la gente que está allá afuera en el mundo, podrán ver que Él es real y habita entre nosotros.

Mientras sigamos jugando a Iglesia Dominical, a cultos divertidos  y hasta chismes y estupideces entre nosotros mismos, el mundo no verá ese cambio que tanto anhela.  Estamos viviendo en unos tiempos muy importantes.  Si una vez conociste a Cristo el Mesías y te has apartado mi llamado urgente es a que vuelvas a los pies del Maestro.  Sin importar lo que veas en los demás, sin importar tú propia debilidad o tu pasado y hasta lo que tú piensas que Dios piensa.  Sin importar nada, vuelve a los pies del Maestro y busca el arrepentimiento de tu alma y la entrada al Reino.

Jesús dijo algo muy importante durante su tiempo de ministerios aquí en la tierra.  Jesús dijo:  “El Reino de los cielos está entre vosotros”.  Creo honestamente que Él se refería a Él mismo, a su cuerpo mientras estaba alrededor de aquellos hombres.  Pues hoy más aún el Reino de los Cielos está entre nosotros, ya que Jesús habita por medio del Espíritu Santo en el corazón de aquellos a los que llama santos, en el corazón de aquellos que lo han aceptado como su salvador personal.  No pierdas la hermosa oportunidad de pertenecer al Gobierno de Dios, el único gobierno que es infalible.  No pierdas la oportunidad de conocer a tu Creador.

Si conoces de alguien que necesita un mensaje de reconciliación para con Dios o necesita una oración no dudes enviar y compartir este artículo o alguno de nuestra pagina.  Nuestro más alto honor sería ver aquellos que una vez se alejaron del Maestro puedan regresar a sus pies.  La dadiva de Dios es para siempre, te invito a que sin miedo des ese paso que es tan importante.

Si nunca has conocido a Jesús o nunca lo has aceptado como tu Salvador personal te invito a que hagas esta oración donde quiera que te encuentres.

“Padre; reconozco que soy un pecador y sin ti nada puedo.  Tu eres Rey.  Tu eres Señor.  Te pido perdón por los pecados que he cometido y te pido en Jesús que entres en mi corazón.  Jesús, te acepto como Hijo de Dios, como mi Salvador y como Salvador del mundo.  He orado en el nombre de Jesús. Amen.”

Si has hecho está oración y necesitas alguna ayuda; como por ejemplo para conseguir un lugar en el que te puedas reunir y conocer a otros hermanos, déjanos saber de ti.  Bendiciones.