Si eres como yo, de los más seguro en tú
caminar cristiano muchas veces te has hecho preguntas como las siguientes;
“¿Qué es lo que falta?, ¿He hecho todo pero aún siento como que hay algo que
falta, como un secreto que no ha sido revelado? O ¿Qué sucede en el mundo que
la Iglesia no es como aquella Iglesia Primera que se cuenta en los Hechos de
los Apóstoles?”
Muchas veces este tipo de preguntas ha
rodeado mi mente y muchas veces salió de la misma sin que encontrará alguna
respuesta convincente que llenara con plenitud las dudas de mi alma y mi
corazón. Sí te puedo decir que hay
“lógicas” humanas que intentan explicar lo que sucede en esta etapa de la
Iglesia, pero en mi corazón es como si Dios me dijera que no… Que no es como
ellos lo explican. Sencillamente porque
esas explicaciones llenas de lógica y sabiduría humana no es lo que dice en la
Biblia. Muchas de estas explicaciones
son un intento de suavizar alguna solida realidad, son como excusas que buscan
hacer quedar bien a Dios a través de mecanismos humanos, cuando en la Biblia
sencillamente dice que cosas mayores que las que yo (Jesús hablando) hago;
ustedes harán. Y muchas veces me
cuestiono, donde estarán esas cosas mayores por la sencilla razón de que los altares
en la iglesias están llenos de personas que son unos eruditos explicando a
Dios, pero fallan en mostrar su poder. Y
esto es algo que desde que me inicié en el camino del cristianismo me ha estado
corriendo en la mente.
En medio de mi búsqueda por una respuesta
apropiada luego de haber leído sinnúmero cantidad de libros concernientes a la
fe cristiana y otros he llegado a la conclusión por el Espíritu de Dios que me
ha traído para este tiempo; que estamos a punto de ver el resurgir de la
Iglesia. No de los cristianos, como se
hacen conocer cuando hacen sus actividades de culto, sino más bien del los
Hijos de Dios, de la Asamblea del Reino de los Cielos y del Pueblo Adquirido
por Dios y la Nación Santa. La Biblia
expresa que el mismo planeta Tierra está en espera de la Revelación de los
Santos y Redimidos, de los Hijos del Altísimo.
Estos son los que traerán la liberación y redención de las cosas que se
han mantenido atadas. Estos son los que
pueden contrarrestar con sabiduría de lo Alto los elementos y estructura que
han sido diseñadas por Satanás y que falsamente y a base de mentiras controlan
este mundo. Estos los Hijos del Altísimo
lavados por la sangre del Cordero. Los
que derrumban el Gobierno Piramidal Egipcio y Babilónico y descubren los
misterios secretos que entre saludos y ritos paganos mantienen a este mundo en
ataduras.
Cristo vino a Restaurar todas las cosas y
el tiempo es ahora en que todas las cosas se redimen. El Cuerpo de Cristo se levanta y por medio
del testimonio y la Palabra vencerán a la serpiente antigua, el diablo. Sé que hay camino por recorrer, es lógico y
lo podemos ver, pero si te puedo decir que el tiempo va en avanzada y que Dios
está haciendo cosas mucho más rápido de lo que lo hacía antes. Hay gentes que están siendo llamadas y comisionadas
rápidamente, en avanzada; como aquel que acelera sus planes y designios para
que sean cumplidos de manera rápida.
Espero en Dios que esta carta sea de inspiración
para ti y para muchos. Tú serás parte
del desarrollo final del plan de Dios para con todas las cosas y si perteneces
a la Iglesia, conviértete en novia y pídele al Señor Jesús que te use para Sus
propósitos. Bendiciones.
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