Dios es y siempre será y tiene un plan
para con tu vida. Es el deseo de Su
corazón que lo puedas conocer y desde la fundación del mundo o sea desde que
creó el mundo te tiene en mente. Primero
debes recordar que Dios es un Dios eterno; o sea que para lo que nosotros es
pasado, presente y futuro, para Él es un eterno continuo en el siempre presente
estando en todos los tiempos. Es
profundo y a veces hasta difícil de captar por la mente humana, pero así es
Dios.
En medio de esto también esta el hecho de
que Dios trabaja con la vida segmentarizada de los seres humano, porque
nosotros aunque tenemos eternidad en nuestros corazones, en el ámbito físico
estamos limitados por el tiempo que divide nuestra vida en presente, pasado y
futuro. Ahora; lo primordial es entender
que Dios trabaja desde la eternidad y tiene una visión realmente panorámica de
nuestras vidas. Por eso el desea que le
aceptemos y que vivamos bajo su cuidado porque el es nuestro Padre que ha visto
el mañana desde ayer y sabe lo que nos conviene y lo que no nos conviene. El sabe de que amistades nos debemos alejar
porque el conoce las intenciones de los corazones. Y más aún; nos ama de tal manera que aquellos
que le han aceptado los convirtió en su nueva familia y los hace llamar Santos,
adeptos de los misterios de Dios y les enseñara cosas que el hombre común no
puede ver aunque tuviere las mejores intenciones en su corazón.
Debemos también comprender que el mundo y
su plenitud pertenecen a Dios. Que todo
fue hecho por medio de Él y para Él. Por
lo tanto cuando vemos a un impío que se jacta de prosperidad y de bienes,
cuando vemos al impío que aparenta tener una vida llena de felicidad y sin
problemas, nos debemos refugiar en que todas las cosas pertenecen a Dios. Debemos gozarnos en la felicidad que vive ese
impío, no por su pecado, y para nada debemos envidiarlo, porque entonces caeríamos nosotros en
pecado. Pero conocemos que el justo
juicio de todas las cosas lo hace Dios. Y
una riqueza o una buena vida alejados de Dios no es en realidad una
riqueza. Y sabemos por experiencia que
el final de una vida que no conoce a Dios; no tan solo es el infierno como dice
la Palabra de Dios, sino que también el juicio aquí en la tierra. He visto como muchas de estas personas
terminan en maldición. Terminan solas,
sin amigos ni familia y usualmente la “buena vida” fue para ellos completamente
pasajero.
Digo estas cosas con esta libertad porque
yo en lo personal experimente “la buena vida” y “gozar de las riquezas”
mientras estaba alejado de Dios. Consumí
mucha cocaína, marihuana y mucho licor. Estaba
supuestamente dándome la “buena vida” en lo natural y no te puedo negar que tal
vez en algunas ocasiones el momento se siente hasta muy bien, pero siempre al
final había un precipicio de muerte que me esperaba. Y todas las noches veía el precipicio de
muerte al cual me acercaba. Mientras
Dios por otro lado continuaba llamándome con su voz de amor a través de Jesús.
La pasión por Dios, el tratar de vivir
bajos sus estatutos y el mantener una relación con Jesús es la manera correcta
de vivir la vida. Te sientes lleno y en
plenitud y sabes que Dios está contigo porque el Espíritu Santo mantiene una
convicción en tu corazón. Simplemente
sabes; no importa cuanto puedan decir las personas a tu alrededor. Dios está a la Puerta tocando y quien abra
asegura una cena con el Señor de los Cielos.
No pierdas la oportunidad de ser participe de las abundantes bendiciones
que tiene Dios para tu vida. Además
tienes contigo la entrada segura a la vida eterna. Bendiciones.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario