miércoles, agosto 01, 2012

La Vida…



Es una experiencia única y muchos de nosotros perdemos el tiempo en una queja continúa no dando el valor que realmente merece.  Deberíamos pensar que de momento vamos a estar en una edad en que no podemos dar vuelta hacia atrás a cambiar ciertas cosas.  A veces veo como madres dejan a sus hijos cuidando para pasar noches (que conste que no dije noche, sino que utilicé el plural) y con esto me refiero a que los dejan días y semanas cuidando para ellas o ellos (porque los padres también lo hacen), solo para pasar tiempo perdido en clubes y pubs, mientras cada vez damos menos tiempos a nuestros hijos.  En algún momento vamos a mirar hacia atrás y nos vamos a dar cuenta de que debimos haber invertido más (mucho más) tiempo en nuestros hijos.

De igual manera sucede con muchas otras cosas en la vida.  A veces preferimos  ver un programa de televisión repetido, en lugar de contemplar las estrellas, o la luna.  Muchas veces preferimos también escuchar un programa mañanero chabacano, en lugar de despertar con una alabanza a nuestro Creador.  La vida se nos escapa entre los dedos de las manos y dejamos las mejores cosas pasar, prestándole prioridad a lo que en realidad nunca debió haber tenido ninguna importancia.  Cambiamos la sonrisa de un hijo, por un abre botellas.  Perdemos la vida por “vivir el gran sabor” por que sentimos que el “cuerpo nos lo pide”[…]  Mercaderes baratos de la publicidad han logrado que le restemos importancia a la brisa en el monte y que pongamos el canal cuatro para escuchar a un actor jugando a doctor (bien pago) y que se las “sabe todas”.  Hemos tomado la opción de que Discovery Channel eduque a nuestro niños mientras jugamos Farmville en nuestro Facebook locos porque llegue el viernes para comenzar nuevamente el ciclo descendente hacia la absoluta obscuridad.

A veces hablo de Biblia, porque es mi libro favorito, de hecho de todos los libros que he leído es el mejor letra por letra.  Pero para este artículo en especifico tome la opción de dejarla de lado (para el artículo solamente) en realidad no quiero que nadie se me altere, bueno como iba diciendo para este artículo opte por dejarla al lado y usar solamente algunas cosas lógicas de vida que he visto y he experimentado, especialmente este asunto sobre la vida y la manera en que muchas veces optamos por desperdiciarla.  La otra vez me quede meditando un tiempo, y como visión en sueño despierto (Day Dreaming), vi que el perfecto hombre o el hombre ideal que todos tenemos en nuestro interior, ese que siempre imaginamos como lo que podríamos ser alguna vez, es la esencia de lo que Dios quiere que seamos.  Para lograrlo o para poder alcanzarlo en la vida real lo único que tenemos que hacer es quitarle el pecado, sí… tan sencillo como lo lees.  En la visión vi que estamos llamados a completar ese hombre (mujer) que ya está en nuestro interior y lo que desea es manifestarse fuera de si al mundo.  Pero es perfecto únicamente cuando nos damos cuenta que lo debemos aislar del pecado.

Creo que aquí logramos ese propósito que Dios destinó en nosotros desde la fundación del mundo.  En mi experiencia personal he visto como continuamente ese hombre intenta decirme que lo deje salir y manifestarse.  También he visto como a través del pecado este hombre se contiene y no puede lograr su realización.  Entonces queremos mostrarle al mundo ese hombre (mujer) que en realidad no puede salir porque el pecado lo tiene prisionero, pero en la búsqueda de esa expresión del ser interior creamos una fachada y mentimos.  Y le dejamos ver al mundo un “supuesto”, alguien que no es real.  Es una falsa imitación de lo que es la imagen de Dios, el hombre contaminado de pecado, un falso.  Este falso es el que hace que la vida se nos escape de las manos, que se nos escurra entre los dedos y perdamos los momentos más bellos.  Por que ese yo es falso, es atraído por lo falso y expresa falsedad.  Mientras el ser interior perfecto diseñado a la imagen de Dios aun está dentro de nosotros gimiendo por salir y manifestarse, entonces creamos conflictos.  Conflicto interno que a la larga se desarrolla y se manifiesta en el mundo externo y todos se dan cuenta de que algo nos pasa.  Y es que tenemos seres encontrados con naturalezas diferentes cada cual buscando la manera de manifestarse en este mundo, mientras seguimos pensando en […] la vida.

Bendiciones

-Antonio Andino Jr

1 comentario:

Sarie dijo...

Yo jugaba Farmville, pero con mis hijos!! Ja ja ja. Excelente Reflexión!

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