A veces las cosas que hacemos o las cosas que decimos o pensamos nos alejan de Dios involuntariamente. No es un deseo de nuestra voluntad el querernos alejar de Dios, a veces las cosas simplemente suceden o son reacciones a eventos aislados que de una manera u otra crean daño colateral. Pero lo que vale honestamente son aquellos momentos en que voluntariamente hacemos o decidimos algo que nos acerca a Dios. Es ahí que Dios logra poner nuestros corazones en peso y en balanza. Cuando de nuestro corazón, cuando de nuestras emociones sacamos la decisión de cambiar la ruta de nuestras vidas a favor del cielo.
La vida no es color de rosa, y nadie dijo que lo sería, pero existen esos momentos de destello, de iluminación que tienen la capacidad de cambiarlo todo. Recuerda que hoy puede ser el primer día de tu nueva vida. Hoy puede ser el día en que las cosas cambien. Hoy puede ser ese día de sueños y metas alcanzadas. Eso se llama un día de redención, de cosas nuevas. As que por voluntad propia, no esperes que alguien te tenga que dar una "palabra" o una "profecía", los donde ya están repartidos al igual que los talentos y te aseguro que tu tienes muchos de ambos. Redescubrete y como dijo Jesus: "al Cesar lo que es de Cesar y a Dios lo que es de Dios"... Esos talentos fueron creados por Dios y para Dios. No importa tu condición, no importa tu pecado, no importa tu pasado, levantate en este nuevo día y disfruta de la maravillosa bondad del Dios de los cielos. Bendecido.
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