Debemos
amar a todos los demás y no importarnos lo que pueden pensar los demás de
nosotros. Nosotros solo podemos sentir
una emoción a la vez, así que nuestro trabajo es conseguir ese estado, esa
emoción única en la que nos queremos sentir; y usar eso en lugar de dejar que el
cerebro gane.
Dr. Michael
Gervais
La razón por
la que cambiamos es por el dolor, la razón por la que crecemos es porque
estamos incomodos y abrazamos la incomodidad.
Ser honestos con el dolor que sentimos es lo que hace que tomemos las
medidas necesarias para cambiar y alejarnos de ese dolor. Corremos al borde de la capacidad que tenemos
dentro de nosotros.
- · Capacidad Emocional
- · Capacidad Mental
- · Capacidad Física
¿Cuáles son
nuestras fortalezas? ¿Hacia dónde
queremos ir? ¿Qué queremos ser en nuestras vidas?
Establecer
una visión.
Lo peor que
podemos hacer por los seres que amamos es tratar de reducir su dolor. El dolor suele ser un gran motivador. A veces necesitamos tocar fondo. Tenemos que arreglar nuestra manera de
pensar. O te hundes en la depresión o adquieres
una mentalidad de crecimiento. Tu
decides lo que quieres y lo que vas a hacer.
Todos estamos sufriendo en algún momento, todos podemos sentir un vacío
que no encontramos como llenar. Todos
podemos relacionarnos de una manera u otra con eso.
Cuando hablamos
de dolor no nos referimos a sufrimiento.
Pero cuando logras ver el dolor en ti, el sufrimiento, puede que pienses
que esa no es la persona que quieres ser.
Ese no es el anhelo o sueño de la persona que habías deseado ser. Nuestro trabajo debería ser ver ese
sufrimiento y ese dolor y darnos cuenta de que no es la persona que deseamos ser,
por lo tanto, ese dolor y ese sufrimiento es lo que nos impulsa y motiva al
cambio.
Debemos desear
sentir toda la experiencia humana en nuestra vida, pero sin dejarnos llevar
profundamente por ninguna de las emociones.
Por ejemplo; cuando le preguntas a alguien que quiere hacer de la vida y
la persona te contesta: “yo quiero ser feliz”.
¿Realmente quieres ser feliz? ¿Se
muere tu abuela y tú quieres “ser feliz”?
Se te enferma un hijo (Dios no quiera) y ¿tu solo quieres ser feliz? No. En
realidad, lo que deseamos como seres humanos es tener toda la experiencia humana
con todas sus emociones, pero sin inundarnos en ellas.
Así que, (y
esto lo tomamos con mucho cuidado), hay una teoría que indica que, si yo me
preocupo demasiado por ti, por tu dolor, tu queja y tu sufrimiento, te estoy
dando el mensaje de que todo está bien en ti.
Pero si dejo que veas y abraces tu dolor y tu sufrimiento tú mismo te
debes dar de cuenta de que no puedes continuar así, de que tienes que hacer
cambios para ser la persona que entiendes que debes de ser.
Queremos
estar rodeados de gente que de alguna manera nos haga sentir bien y cómodos,
pero a la vez que sean un reto para nosotros convertirnos en mejores personas. Lo que queremos sentir es que nos entienden y
que cuando se toman decisiones en los círculos en donde nos movemos, queremos
sentir que se nos toma en consideración, que somos parte de algo. Debemos entonces invertir en nuestras
relaciones en todas las áreas en que nos desenvolvemos en nuestra vida. Nos gusta sentir que se toman el tiempo de invertir
en nosotros. Entonces en todo lo que
hacemos debemos poner por prioridad las relaciones interpersonales. Aunque seamos una Iglesia, primero son las
personas. Aunque seamos un equipo de baloncesto
o cualquier otro deporte, primero vienen las relaciones y las personas. En resumidas
cuentas, la gente va primero.
Los
mecanismos de supervivencia y huida en nuestro sistema son más fuertes que
nuestros mecanismos de valía y temperancia ante el reto de las situaciones y como individuos
tendemos a huir y buscar la comodidad ante toda situación. Cuando formamos parte de equipos donde las
relaciones son la prioridad podemos entonces entrelazarnos ante la adversidad,
es la única manera en que podemos vencer.
El individualismo nos hacer caer, y ninguna lucha se puede ganar a nivel
individual cuando como equipo que se basa en las relaciones existen mayores
probabilidades de valernos y sobrepasar esa adversidad.
Cuando nos
quitamos del equipo y comienzan a desarrollarse elementos de individualidad ahí
es que se pierde, caemos y terminamos fritos, activamos nuestro egoísmo.
Recuerda
que estás en relaciones comunales en cada aspecto de tu vida. Te desarrollas en diferentes grupos sociales
y familiares siempre en tu vida. Amigos, familia, trabajo, iglesia y grupos
comunales. En cada grupo debes poder
aplicar el principio de que las relaciones van primero. Esto para que esos grupos en los que
participas sean victoriosos y puedas salir vencedor. Que la identidad del grupo se convierta en
una de relaciones.
Recuerda que hay 3 niveles de conversación que
puedes ver en cualquier ambiente donde se mueven personas:
- Conversaciones superficiales: Estas son por ejemplo cuando se habla de pizza y de cervezas. Cuando se habla de deportes, equipos y eventos deportivos.
- Conversaciones medias: tildan entre las superficiales con uno que otro comentario profundo.
- Conversaciones profundas: que nos llevan a analizar las cosas más importantes de la vida. También son conversaciones más difíciles de articular.
Creo que
entre estos tres tipos de conversaciones puedes identificar el tipo de equipo o
grupo en el que te encuentras y si son un grupo o equipo basado en relaciones
interpersonales o no.
Las
relaciones intimas son un reto. Y es que
tenemos que recordar que en las relaciones intimas hay alguien que
profundamente te conoce. De todas maneras,
hay que recalcar que hay una soledad en la experiencia humana a la que debemos de dar
honor. Esto lo sacamos cuando entendemos
que no existe una persona en la tierra que nos conoce al 100% y esto genera un grado
de soledad que es sagrado, podemos decir.
Y añado que a lo sagrado, lo Sagrado.
Es el espacio para compartir con Dios, quien sí te conoce al 100% y está
en la experiencia humana, pero también está más allá. En ese sector de soledad que todos tenemos y
que es sagrado, ahí se encuentra nuestro lado más honesto, y por eso pertenece
a un Dios que está interesado en nuestra honestidad cuando nos comunicamos con Él.
A veces
leemos, buscamos y nos entregamos a la teoría del manejo de nuestras relaciones intimas y con los demás, incluyendo a Dios.
Nos enfocamos en la teoría de como todas las cosas funcionan y ahí nos
quedamos. Pocas veces entendemos que el
secreto está en la acción. Que tal vez
no hay tal cosa como el eslabón perdido para entender y vivir la vida. Leíste, aprendiste, escuchaste la predica,
pues es la hora de aplicar lo bueno que retuviste. Si sigues en la teoría vas a debilitar todas
tus relaciones, porque serás de esos que hablan sobre algo (teórico), pero practican (hacen) otra cosa.
Para terminar este corto escrito termino
diciendo que la Biblia nos invita a ser ilimitados. Nos dice también que todas las cosas son
posibles. Todo lo puedes hacer. Nuestra limitación es una más bien mental, de
paradigmas y de estructuras mentales que nos acondicionan desde la infancia. Voy a ti.
Toma un nuevo respiro, abraza el dolor y muévete de lo que causa ese
dolor y conviértete en la persona que siempre has tenido en tu mente como ideal. Dios ha puesto dentro de ti todo lo que necesitas. Y si algo te falta, tienes el beneficio de que
se lo puedes pedir y Él estará más que contento de dártelo. El deseo de Dios es que cumplas el ideal que Él
tiene de ti desde la fundación del mundo, desde antes que nacieras ya tenías un
propósito diseñado por parte de Dios.
Creo que la vida se basa más en descubrimientos más que cualquier otra
cosa. Nos toca descubrir los tesoros que
Dios ya diseñó de antemano para nosotros, pero para esto hay que estar en la frecuencia
de Dios. Es imposible escuchar 99.7FM cuando estás sintonizando 106.9FM. De
igual manera somos nosotros, para ver todo lo que Dios tiene para nosotros, tenemos
que sintonizar su frecuencia y prestar el oído, tal y como haces con la radio.
Espero que
este corto escrito te haya sido de bendición y si así lo fue te pido de favor
que lo compartas con alguien que lo necesite.
Todos juntos podemos salir de cualquier condición que entendemos que
estamos. Y Dios está de nuestro lado y
contamos con su favor. Con el favor de
Dios todo es posible.
#Bendiciones
Antonio
Andino Torres
No hay comentarios.:
Publicar un comentario